Alta mar, 2021

El hecho de trasladarse a Barcelona desde Siberia (Rusia) se ha reflejado también en las obras de Anna. Esta obra es uno de los ejemplos de esta influencia. Hecha de figuras geométricas, aunque no siempre perfectas, a veces desordenadas, como trozos de un cristal roto, pero a la vez suaves, como la naturaleza, representa lo flexible que es este mundo. Cada triángulo, cada círculo, que por separado no significan mucho, cumple su función para formar parte de un cuadro completo.

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Anna Knyazkina

Anna Knyazkina es una artista nacida en Siberia (Rusia). Desde muy joven empezó a desarrollar su lado artístico, terminó varios estudios relacionados con la pintura: escuela de arte, cursos de pintura al óleo y pintura intuitiva, dibujos de modelos de moda y vestidos de novia con acuarelas, estudios de pintura con el hemisferio derecho del cerebro y cursos de arteterapia. Desde el comienzo, la obra de Anna ha tenido como propósito plasmar en los cuadros su sensibilidad hacia las situaciones cotidianas de la vida, expresar todos los sentimientos íntimos y personales. Cada obra tiene un significado distinto, al igual que los materiales (óleo, acrílico, acuarela, técnicas mixtas), y se pinta de forma especial, para poder mostrar toda la belleza en cada uno de los lienzos. 

Desde 2019 vive en Barcelona (España). Ha lanzado varios proyectos propios, entre ellos ArtHiking.